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Día 1-Erlan Cien años han pasado desde que zarpó el último barco de los puertos de las islas flotantes de Arihela. Desde el colapso de las minas de cristales de aire. Pero las locuras de Grute llevaron a construir un barco que podía volar sin la magia de los cristales. Las islas se burlaron de el, lo llamaron tonto, ingenuo, demente, entre tantos nombres más, aún cuando su barco lleno de tuberías de cobre, vapor y velas laterales, flotaba en el puerto, la gente seguía riendo y apuntando.       Ya hemos zarpado y aún los veo. Es cierto que no tenemos mucha experiencia, pero que esperaban, los aeronautas que quedaban murieron hace tiempo; bueno solo queda el viejo Tally, pero ya ni puede formar oraciones completas. Aún así lo trajimos, ahí está en la bodega, cómodamente mientras el resto tenemos que atar cabos, arreglar velas y hasta hacer cuerdas. Imagino que era bastante difícil arreglar las velas cuando estaban verticalmente arriba del barco, pero ahora que están la...

El tema común en Tikerra es el aislamiento, un enorme planeta, lleno de razas, culturas, pero divididas por desastres naturales, peligros y hasta poderes sobrenaturales. Xiotam no es la excepción a la regla. Esta isla está rodeada por grandes remolinos marinos, terribles tormentas y poderes sobrenaturales mantienen a los habitantes dentro de la isla. Si no fuera suficiente, las pocas criaturas que entran o salen de la isla, son tan temibles, enormes y poderosas que agregan al peligro que rodea la isla. Tan es una norma, que los habitantes consideran esta situación su destino divino, con tantas mitologías rodeando las razones para su destino pero todas recaen en manos de una deidad que los salvó.      A su vez la isla está dividida en dos partes, el lado sur y el norte, los divide un nudo montañoso. Pocos se atreven a cruzar al otro lado, el clima frío, cruel y ventoso acompañado de criaturas territoriales, mortíferas y mágicas. Mas hay una alternativa, una serie de cavern...

Alix y Eri cultivaron una relación de amistad como solo lo pueden hacer los jóvenes. Aún antes del amanecer las chicas ya se habían reunido, cocinaron el desayuno, se escabulleron al bosque a recolectar plantas medicinales. Eri le enseñó un poco de lo que sabía acerca de encontrar las mejores plantas y evitar las que eran venenosas, le dio una lista de las cosas que cada una podía curar y le platicó de las leyendas en las que aparecían algunas de ellas. Volvieron al carromato, emprendieron el camino y desayunaron con todos. Una vez solas, expusieron su botín y Eri tomó su rol de maestra para enseñarle cómo preparar emplasto, elixir y brebajes, desde las partes más útiles hasta como cortarlas y cocinarlas para obtener la mayor cantidad de beneficios. Alix ignoraba que las plantas fueran tan útiles, mas encontró una pasión por ese tipo de remedios. Para cuando terminaron Ronte cocinaba la comida y Punali bajaba del carromato, a ver como se encontraba Jakul, Rexa en cambio daba vueltas ...

  El interior del carromato parecía más grande que el exterior. Todo era de madera y estaba seccionado igual que una casa pero en tamaños reducidos. Cuatro habitaciones minúsculas con dos camas en vertical pegadas a la pared y con series de tres cajones alargados debajo de cada colchón, además cada habitación contaba con una ventana pequeña y redonda entre las dos camas, con cortinas rojas como de terciopelo. Al fondo, antes de salir al asiento del conductor había un cuarto principal con una cama grande, dos ventanas circulares y dos mesas de noche que estaban fijas al suelo. Suficiente espacio para pasar alrededor de la cama y un tipo de armario que se extendió del techo a metro y medio sobre la cama. Además de las habitaciones una pequeña sala para seis personas recibía a la gente al entrar por la puerta posterior, entre dos de las habitaciones y en contra de la principal, una cocineta calentada por cristales de fuego, con una ventana que podía ser cubierta por un toldo de madera...